Mejor que al desnudo

por:Haley_jsb

Dan intentó no mirar a los modelos que llegaron a la pasarela durante el desfile de la mejora que el frío sólo con pana marrón minifaldas plegadas sin nada. Las faldas eran tan cortas que incluso se podía ver la ropa interior blanca con volantes que llevaba debajo, que pasó a ser de bragas de las niñas en la década de 1950 y los modelos eran tan apretados que las nalgas explotar hacia el exterior. En vez de sentarse en primera fila, donde Rusty Klein había conseguido pegarlo en una silla entre Stevie Nicks y vanguardista artista de performance Vanessa Beecroft, Dan se quedó en la parte trasera de la calle Harrison Club, tomó el bloque de la cubierta de cuero negro, tratando de mantener un escritor de la esencia del caso de Rusty Klein estar cerca, analizar escondido.
El desfile fue montado con una música popular alemana extraño y no se dispersa la paja en el paseo. Los niños pequeños con el pelo rubio y corto la página, el tipo, utilizando el tipo de campesinos de los Alpes, liderados cabras balando en correas de cuero blanco imposiblemente alta como modelos desfilando detrás de ellos, los pechos desnudos tirándole.
Bestialidad, Dan garabateado furtivamente en el bloque. Las cabras cagavam en todas partes y se dio cuenta de que el dobladillo de las faldas de los modelos ha sido destrozado a propósito. Lágrimas corrían por sus rostros con lápiz azul iridiscente. Lecheras arrasada, Dan escribió, tratando de no sentirse completamente ido. ¿Qué demonios estaba haciendo en un desfile de moda, de todos modos?
La morena veinteañera junto a él se inclinó y trató de leer lo que escribía.
- ¿De dónde eres? - Pregunta. - Nylon? Tiempo de espera? - Llevaba gafas puntiagudas, tachonado con diamantes de imitación, que se adjunta a una cadena de aura de estilo antiguo señora alrededor de su cuello y había más gruesas franjas que Dan había visto nunca. - ¿Por qué no está sentado con la prensa?
Dan cerró el bloque antes de que pudiera leer otra cosa.
- Soy un poeta ", dijo, satisfecho. - Rusty Klein me invitó.
La mujer no parecía impresionada.
- ¿Qué ha publicado últimamente? - Le preguntó con suspicacia.
Dan puso su paquete bajo el brazo y pasó los dedos por las chuletas de nuevo. Una de las cabras se había soltado y rebotó en la pasarela. Cuatro guardias de seguridad corrieron tras ella.
- En realidad, uno de mis últimos poemas están en Nueva York esta semana. Se llama "putas".
- ¿Estás bromeando! - La mujer dijo con entusiasmo en un susurro. Ella tiró de el bolso de cuero color lavanda mejor que la vuelta desnudos y agarró la copia de la Nueva Yorker. Hojeandolo, se dio la vuelta en la página 42. - Usted no entiende. Leí este poema en el teléfono a todos mis amigos. No puedo creer que usted lo escribió.
Dan no sabía qué decir. Este fue el primer encuentro con un verdadero fan y se sintió avergonzado y excitado.
- Me alegro que te haya gustado - me respondió con modestia.
- Me gustó? - Repitió la mujer. - Cambió mi vida! Cuidado con autógrafo para mí? - Le preguntó, empujando la revista en su regazo.
Dan se encogió de hombros y tomó la pluma. Daniel Humphrey, que escribió junto al poema, pero la firma parecía simple e impersonal, por lo que agregó un poco inferior florecer curvas. Había escrito unas líneas sobre la historia de Gabriel García Rodas, que parecía una especie de sacrilegio, pero que se preocupaba por esto, cuando dio su primer autógrafo? Era famoso - un escritor verdadero, el auténtico!
- Muchas, muchas gracias - dijo la mujer, teniendo la revista de nuevo. Ella señaló hacia el bloque de él. - Ahora usted puede seguir escribiendo - susurró en un asombrado.
- Lo siento si he molestado.
La música popular alemana se ha transformado en una ópera y los niños pequeños a la izquierda del pasillo principal cabras. Los modelos flotaban con pieles y lana negro y largo, botas de gamuza y hasta la rodilla gorras azules de plumas de avestruz. Parecían personajes de El señor de los anillos.
Dan abrió la mochila y comenzó a escribir. Brujas buenas y malas, garabateó. Lobos la caza de hambre. Se mordió la punta de la pluma y añadió: Me gustaría poder fumar un cigarrillo de mierda.